¿Sabes que puedes mejorar la productividad en tu empresa si dispones de las herramientas adecuadas? En este artículo te mostramos cómo llegar a conseguirlo. ¿Nos acompañas?

La productividad en tu empresa

 

La productividad está definida como el máximo resultado que se puede alcanzar  utilizando la menor cantidad de recursos posible. Esta premisa se debe asumir en todas las empresas del mundo si se desean conseguir unos ingresos óptimos para la misma.

Una de las primeras premisas que se deben asumir cuando queremos mejorar la productividad de una empresa es la de disponer de las herramientas apropiadas para los trabajos que se realizan.

Los profesionales del sector deben disponer del equipo necesario para que puedan llevar a cabo sus labores en la empresa. No obstante, no siempre el equipo disponible es el mejor para acometer las labores pertinentes.

Por este motivo, se debe conocer qué es lo más novedoso que el mercado nos puede ofrecer para trabajar de forma efectiva, teniendo la garantía de que su adquisición supondrá una mejora cuantiosa para la empresa. Recordemos que si los trabajadores realizan sus labores de modo más ágil y con menos riesgos, rendirán más y tú ganarás dinero.

Otra premisa que merece tu atención es la posibilidad de que los materiales que utilizan pueden abaratarse de alguna forma. La primera o más intuitiva es buscar proveedores nuevos que nos faciliten la materia prima más barata, pero esta no es la única.

Se puede, y debe, llevar a cabo un estudio para comprobar que los materiales que se usan para lograr el producto final se pueden reducir o si las herramientas pueden trabajar empleando menos (siempre y cuando se mantenga la calidad).

Las herramientas movilizadas en trabajos técnicos son muy diversas. Nosotros nos vamos a centrar en las que se usan para trabajar con tuberías metálicas o de plástico.

Para trabajar con tubos

 

Una de las actividades más habituales en las instalaciones de gas o hidráulicas es el corte de tubos. Para realizar estos cortes existen diversos tipos de máquinas, tanto para materiales duros como para tuberías blandas.

Estos cortes se pueden ejecutar con sierras u otras herramientas parecidas. No obstante, estas herramientas pueden dejar rugosidades en el corte o deformar la pieza restante. Por ello, suele recurrirse a cortatubos específicos para cada tipo de situación.

El método de corte va a depender de varios factores como son el diámetro, el lugar en el que se encuentre o el acabado requerido. En el caso de las tuberías que se emplean en los sistemas presurizados, el sistema de ranurado es el más recurrente al resultar eficiente, limpio y seguro.

Unos buenos complementos para este tipo de sistemas son las biseladoras, que preparan el tubo para ser soldado, o los escariadores, que disipan las virutas de la pieza.

Este tipo de sistemas ahorran en varios factores decisivos contribuyendo así a que la productividad de tu empresa sea mucho mayor.

Como ves, la productividad en tu empresa debe ser tu mayor prioridad y, por ello, resulta necesario que lleves a cabo un estudio de cómo mejorarla a partir de las herramientas idóneas. Unos recursos que podrás adquirir en Arsam. ¿A qué esperas?

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